sábado, 15 de septiembre de 2012

Cuando él te pone (los cuernos) A3MSC

     Ayer fui a comer con unas amigas y de pronto me encontré con alguien de mi pasado. Personas que te apetece tanto ver como sentarte sobre un cactus por accidente y decidí escribir sobre ello.

        Todas hemos tenido un primer amor y un primer dolor. (Conozco un caso en que coincidieron).
        He recurrido a lo de “a 3 metros sobre el cielo” no porque me guste la novela, el actor, o la peli, sino porque sé a la perfección lo que es sentirse así. Supongo que si hubiera visto la película o leído el libro siendo adolescente me habría encantado, me contó la chica que vivió esta historia que aunque fue una de las experiencias más intensas de su vida no volvería a vivirla.

Por supuesto ella iba al instituto y él ya había ido. Era dos años mayor que ella, muy guapo, atractivo, un rebelde sin causa- como James Dean pero sin su elegancia y estilo- y obviamente, como no podía ser de otra manera para alimentar el topicazo de la historia de amor adolescente él tenía moto.
Como ya os habréis imaginado ella era la típica niña buena que nunca se mete en líos ni sabía lo que eran éstos. Era una alumna aplicada, modosita dirían unos, aburrida dirían otros por lo estudiosa que era, pero también muy graciosa.
        Él tenía a todas las que quería y ella tenía un novio formal de poquito tiempo.
James Dean se burlaba de ese tipo tratando de llamar la atención de la modosita y aplicada Pier Angeli la cual no soportaba a Dean porque no aprobaba que viviera al margen de todas las normas que ella amaba. Lo consideraba incorregible, insensato y con un punto de locura que lo apartaba de ella.
El caso es que Dean fue muy persuasivo, hizo todo lo posible y lo imposible porque Pier se enamorara de él. Lo consiguió y empezaron a salir juntos contra todo pronóstico social.
Pier descubrió otra forma de vida muy distinta y desconocida a la que ella vivía y conocía.-Me gustaría contaros que descubrió vida extraterrestre, o que se hizo amiga de E.T, pero no...
          Sus mejores amigas Flora y Fauna la apoyaban en su relación porque sabían lo importante que era para ella un primer amor y que nunca había tenido uno. Pier y Fauna habían sido íntimas amigas desde los 5 años, compartían aficiones y confidencias. Hasta esa fecha, nadie conocía tan bien los sentimientos de Pier por Dean como Fauna.
Flora y Fauna sabían que Pier era muy distinta a ellas -ellas dos eran muy iguales entre sí- pero la querían y aceptaban de todos modos. Sabían que ella quería tener a un chico especial para hacer lo mismo que ellas hacían cada fin de semana, esto les parecía aburrido, pero lo respetaban. Además, desde que Pier salía con Dean estaba mucho más alegre. Y todos juntos, -porque también había otros chicos en este grupo-compartían actividades que eran muy divertidas para todo, menos para la salud. -¿Pero quién piensa tanto cuando es joven?
       Ese amor fue tan grande porque Dean enseñó a Pier todas esas cosas por las que vale la pena vivir o la mayoría de ellas -así se sentía Pier con él, así lo amaba. Cosas, que no venían en los libros que devoraba Pier. La enseñó a divertirse, a que saltarse las normas establecidas siendo adolescente es mucho más emocionante que hacer siempre lo que te dicen. -En realidad Pier podría haber aprendido a ir en parapente a 3 metros sobre el cielo, pero eligió esa relación-. Cada día era una gran aventura en moto a gran velocidad, hacer novillos del instituto para estar con él era lo más importante. La enseñó a mentir en casa para poder estar juntos todo el tiempo posible. En resumen, le enseñó lo que era el amor -y a hacerlo-, y también la pasión -y a vivirla- tenían tanta química como todo el laboratorio de Bayern de dónde vienen las aspirinas.

Todo fue muy rápido -al igual que lo es el paso de los años en las películas- y llegó Mara, porque como dice la canción, “no hay dos sin tres”. Mara estaba con un chico del grupo pero rápidamente hizo buenas migas con Dean, lo cual desató los rumores y habladurías que siempre hubo, sobre la reputación -sin prefijo ni desinencia de esta última palabra-, de Mara en el instituto. Pier era muy sociable y pasaba de las habladurías así que se hizo amiga de Mara.
 En un pestañeo, a Mara le gustaba Dean y coqueteaba descaradamente con él. Pier salió del instituto y la emprendió a golpes con Mara por aquellos coqueteos y porque Dean tuvo un desliz -(por la boca y el cuerpo)- de Mara. -Huelga decir que Pier en este punto ya era como Juana sin Felipe. La pasión exacerbada conlleva celos desmedidos y Pier igual que Juana la Loca practicaba eso de "odio a todo lo que se interponga entre tú y yo, así sea el mismo aire..". Pier empezó su carrera hacia la locura en solitario, no comía, no dormía, sólo lloraba, se comparaba con Mara no entendía nada... Echaba de menos a Dean, lo amaba y así nació la obsesión...

Esta pelea fue al más puro estilo Mara contra Babi en a 3 metros sobre el cielo. Las protagonistas de la pelea de la película se parecían mucho a Pier y Mara. -El combate habría tenido gracia si en el tercer asalto una de las dos hubiera desbloqueado a Pepe como si estuvieran en el juego del Tekken, pero no fue así y no tuvo gracia.

Y al igual que en la mencionada película Hache se lleva a Babi de allí con una sonrisa de orgullo, Dean se fue con Pier y le dió la enhorabuena a ésta... -Menos mal que no le regaló también un tatuaje.

Termino esta parte de la historia preguntándome sobre la misma:
¿en el amor y en la guerra todo vale?
¿Vale la pena perdonar porque nunca nadie te ha hecho -ni te hará- sentir así?
¿Es perdonable una infidelidad cuando el otro es lo que más quieres en el mundo y crees que lo vuestro vale la pena?
¿El amor es algo por lo que luchar física o emocionalmente?

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