miércoles, 26 de febrero de 2014

Entrantes

Buscabas un plan y una mujer dócil con la que cenar.  
Hombre de armas tomar, habitante de mi ciudad natal.
Tú hablabas de jardín, piscina cerquita del mar.

Yo hablaba de emociones, corazones y libertad.

Ni mantas compartidas, ni atardeceres en Cambridge.
Ni dar mi reino del Norte, ni el sol de mi roqueta en abril.
Con tierra de por medio fue más fácil volver a reír.
Que San Valentín y Cupido se apiaden de ti.

Es menos peligroso estar sola que cerca de ti
y aunque me aprieta el frío parece que ahora soy feliz
el tiempo le ha sentado bien a mi pequeña cicatriz
que en noches como esta amenaza con volverse a abrir.
 
Mientras sigues de fiesta con tu princesa azul
a mí me dio por escribirte un blues.
Dos estrofas sin magia en plan sentimental
ya sabes que siempre estuve loca y fui especial.
Un ajuste de cuentas, un inventario gris,
un recordarte que es mejor así,
un recordarme que es mejor así.
 
Es menos peligroso estar sola que cerca de ti.

lunes, 10 de febrero de 2014

Recaída

En todo proceso de desintoxicación pueden ocurrir las recaídas. 
Hay muchos factores de riesgo que en terapia, los adictos a relaciones destructivas, o a cualquier cosa, aprenden a manejar y controlar.

Cuando estás bien no sientes que te pueda pasar a ti porque tienes mucho recorrido ya, estás mucho mejor y eres otra persona.

Pero estás a 3000 kilómetros de casa, sin tu zona de confort, sin tus amigas, sin tu casa, sin tu idioma, con el “tengo mucho frío” que como todo el mundo sabe viene del latín “necesito que me abraces”...

 El trabajo se complica, esto no es lo que imaginabas... Tu sueño se ha hecho realidad y pese a tu naturaleza pesimista hay muchas cosas que no esperabas.

De todos los pecados capitales la soberbia es el más peligroso y el peor, por eso es el mío; pues te crees que estás bien y que esto no es nada, que puedes con todo y que golpes más fuertes te has llevado.

Recuperarse de la dependencia emocional enseña muchas cosas, te enseña a crear un buen escudo protector, lo llamaré Firewall. Nadie lo cruza, todos mueren en la primera pregunta, los más osados en la segunda. Ninguno logra obviamente conocerte ni saber nada importante de ti. No les das nada de valor porque sabes lo difícil que es encontrar a quien lo merezca y que hay que dar con cuidado, no prostituirte emocionalmente como hacías antes tan bien.

Pero entonces se hace de noche a las 4 y cuarto de la tarde y desde entonces él hace que sea de día hasta que te duermas. Pero tú eres muy fuerte y puedes con todo porque estás hecha a cosas peores que las que te pasan. Él no destruirá tu firewall por hacer días las noches, eso es una nimiedad y sólo es un chico, tu soberbia se alimenta de destruir chicos como él en tu mente para que nunca lleguen al disco duro :C Corazón. No destruirá tu firewall de máxima seguridad simplemente porque ninguno lo hace; elaboras un perfil de él en lo que se hacen las tostadas de los niños, defects not found.

 Es un peligro no hallar defectos, pero también tienes ganas de no hallarlos por una vez. El miedo y las ganas se pelean mientras él hace que sea de día cada noche. Pero tú sigues ahí, fuerte cual roble. No vas a caer, es más de lo mismo. Pero cuando te dices esto, ya te ha dicho cosas que sabe decir muy bien. Ya ha hecho cosas fáciles que por ganas te han llenado como si fueran difíciles.

Era un troyano. Firewall down. Has recaído con todo el equipo. 

Solución: Format C: (Bórralo de todos tus archivos centrales o periféricos Carmen).

Reset, que como todo el mundo sabe viene del latín forget., olvidar.

sábado, 8 de febrero de 2014

Mi mejor amigo

A veces a las chicas especiales como yo nos pasa que sentimos taquicardias y dolor en la boca del estómago. El problema es cuando pasa por la calle y no puedes respirar y te mareas. En esos momentos mi mente sólo procesa que tengo que ponerme bien porque trabajo en una hora y eso sólo me pone peor. Entonces he entrado en casa flotando, he dicho hola en otro idioma y he subido tres pisos luchando por no desmayarme por las escaleras y rodar escalera abajo cual sonic.-Suelo bromear cuando algo me duele.

Vivo en una buhardilla con trastero, el trastero tiene una puerta pequeña de un metro veinte de altura. Suficiente para gente pequeña como yo. Me he tumbado allí dentro en posición de prono supino, pero mi corazón tenía muchas cosas que decir en código morse todavía.

Algunas chicas que somos especiales sabemos que cuando todo se desmorona no podemos contar con nuestros padres por diversas circunstancias. Tengo la suerte de poder tener un muy buen amigo cuando eso ha pasado alguna vez.

Un día como hoy hace unos dos años me fui con el coche de madrugada porque sólo quería desaparecer. Son cosas que hacemos las chicas especiales cuando tu padre ha muerto y el único por el que has sentido algo desde entonces se pasea con tu sustituta debajo de tu casa de la noche a la mañana. Nunca se debe conducir en ese estado de nervios, paré el coche y sentí que no podía moverme y que nadie podía ayudarme a sentirme mejor pero lo llamé.

-Toni, lo siento, sé que es muy tarde...
-¿Qué te pasa?
-No lo sé, no puedo moverme ni puedo respirar. No quiero que me vea nadie así.
-Carmen si lloras no te entiendo nada ¿Dónde estás?
-Cerca de mi casa, me he parado en el arcén. No puedo seguir conduciendo. No puedo seguir con nada de todo esto, no sé qué decir...
-Quédate allí y no te muevas.
No sé cuanto tiempo pasó.
-¡Ábreme la puerta! ¿Me puedes explicar que haces aquí sola? Hace frío y es tarde, yo vengo de hacer cervezas pero ¿tú no deberías dormir o estudiar?
-No podía dormir, ni estar más en casa ¿sabes? Tenía que irme a alguna parte lejos, no quería que nadie me encontrara pero no me encontraba bien y te he llamado...
-Carmen, es tarde y es evidente que no estás bien, exprésate y no me digas que no te pasa nada porque no tengo tanta paciencia ahora mismo.
-No puedo más. Creía que podría con esto pero no puedo. No puedo irme muy lejos de casa porque me ahogo, lo he intentado pero me ahogo y ahora no puedo estar cerca de casa tampoco porque le veo con ella... Mi padre está muerto. No puedo estudiar, ni trabajar, ni divertirme como antes, no puedo vivir así...
-Muy bien ¿y qué? ¿Te vas a quedar aquí encerrada en el coche hasta que sea de día? Si estás mal llora, pero ya basta de encerrarte. Eres joven Carmen y eres fértil, no te preocupes tanto. ¿Sabes por qué no puedes tener novio? Porque no lo necesitas y todos ellos, todos y cada uno de ellos lo ven ¡joder!, todo el mundo lo ve menos tú. Te crees que los necesitas pero no necesitas a nadie Carmen. Eres más lista que ellos, procura que no se den cuenta de eso ni de que no los necesitas. A casi ninguno le gusta eso.Te han cambiado por otra, pues te jodes, es lo que hay. Asúmelo. Aprende a perder Carmen ¿o vas a hacer el ridículo como tus amigas?, ¿vas a regalarte más? Porque los que te queremos, y yo ahora mismo no sé por qué pero también te aprecio, los que te queremos estamos hasta los mismísimos cojones de verte así.
Sabes valerte por ti misma. Sabes llevar una casa, tienes estudios. Ya sabes cambiarle el agua al coche, los limpiaparabrisas, sabes hinchar las ruedas, yo te enseñaré a pasar la ITV porque no pienso acompañarte nunca más, tienes que aprender tú sola, no necesitas a ningún tío. No los necesitas y ellos lo saben y eso a muchos tíos les da miedo Carmen, los hay que no, pero tú te vas a por los que sí. ¿Alternativas? Hay siete mil millones de personas en el mundo Carmen, dicen que la mitad son hombres, si es por follar sólo tienes que elegir, eres tía, haz jornada de piernas abiertas. Celebra el año de la zorra en tu calendario chino personal, tienes edad de follar más y pensar menos que sólo se vive una vez. Si me apuras -y te va a doler lo que te voy a decir pero es la verdad y yo nunca te diré lo que quieras escuchar, te diré siempre lo que pienso-. Ni siquiera necesitas a tu padre, yo he salido adelante sin uno y mira que al tuyo le tenía aprecio tú lo sabes, pero se ha muerto y tienes que asumirlo y hacer algo con tu puta vida y sola. No voy a quedarme viéndote como te encierras en las dos calles de al lado de tu casa. Mi abuela sale más que tú. Tienes toda tu vida para salir sólo a dos calles de tu casa. ¿El mes que viene será sólo a una calle de distancia y sino ataque de ansiedad?, ¿te das cuenta de que cada vez te encierras más? ¿Qué será lo próximo, no salir de tu casa por si te encuentras a alguien? Tú no tienes que esconderte de nadie. Mira a tu puto miedo a la cara porque te está comiendo y es muy patético verlo. Es patético verte arreglándote y entaconada como te veo para ir siempre al mismo bar debajo de tu casa esperando a que alguien que obviamente no te merece y al que, lo siento, pero le importas una mierda, se enrolle contigo. Es patético verte hacer eso ¿piensas seguir así toda tu vida? No voy a quedarme a verlo, habla, llora, pero haz algo.

A veces como hoy, él es el único que puede entenderme y entender que me cuesta mucho despertarme por las mañanas y que necesito una hora para estar en el mundo y silencio mirando mi café o me pongo de mal humor.
Que cuando tengo hambre estoy irascible y que no soporto que me molesten cuando estoy comiendo.
Que me da miedo ir en coche muy rápido, pero que no digo nada por no molestar a quien conduzca. Que la nevera para la playa pesa mucho aunque yo finja que no y no le pida ayuda para llevarla.
Que cuando me rompen el corazón yo finjo que no sé que él ha perdido a propósito jugando a póker para venir a dormir a casa y que yo no esté sola llorando hasta que me duermo.
Que cuando como hoy no puedo más, a 5 horas de distancia y unos 3000 kilómetros lo convierta todo en menos triste y le pueda sentir tan cerca.

A veces las chicas especiales escogemos mal a esos tipos por lo que sentimos algo, pero sé que a mi mejor amigo lo escogí muy bien.




martes, 4 de febrero de 2014

27

Me cambió por otra. Es algo muy común pero yo no lo sabía entonces. Dijo: “yo nunca te he querido, todo era una broma, son bromas que le gasto a todo el mundo” y así terminó él con una relación de 7 años como si yo fuera algo desagradable que quitarse de la suela del zapato evitando tocarlo.

Así, el día que cumplí 22, me llamó para felicitarme y comunicarme que había pernoctado con mi sustituta de una forma que yo no voy a reproducir, amén de otros escabrosos detalles del encuentro sexual que por respeto a que ella es mujer y yo también, omitiré.
Siempre he sido partidaria de la extrema generosidad en los “divorcios/rupturas” y creédme si digo que no me han dado motivos para serlo. Por tanto él se lo quedó todo; su familia, el beneplácito de la mía que desconocían la verdad, todos nuestros amigos que nunca más se dirigieron a mí, la biblioteca, el bar... Todo. El tiempo me ha enseñado que la vida sólo estaba apartando aquello que me sobraba, pero dolió mucho igualmente.

En ese momento eso era lo peor que me había pasado en la vida y que me estaba pasado. No sabía entonces lo afortunada que era. Me dediqué a autodestruirme y como acuario perfeccionista que soy lo hice bastante bien. Estuve emborrachándome durante tres meses seguidos sin parar, sola o acompañada. Viví mi propio “living las vegas” en una fiesta constante, sin parar de salir, sin control, sin responsabilidad, fallándome a mí misma... Al tercer mes el padre de mi mejor amiga me dijo: “te considero lo suficientemente inteligente para poder escoger si quieres ser una alcohólica y suicidarte lentamente o vivir y te aconsejo no tardar mucho en decidirte no siendo que cuando quieras dejarlo tú ya no puedas decidir sobre ello”. Entendí que aunque me bebiera todo el desamor en cubalitros y el dolor en chupitos de tequila él no iba a volver pero me quedé esperándole en el muelle de San Blas igualmente.

Por supuesto mi despecho tomó cartas en el asunto en esos meses en que me di a la bebida y a la comida, él estaba ya con otra y yo no iba a ser menos, así que me aferré muy fuerte al primero que pasó por delante de mí, me obligué a quererle y lo conseguí. Él era un excelente compañero de irresponsabilidad, excesos y fiesta. Él era la mejor venda que podía ceñirme a los ojos para no verme ni ver lo que me estaba haciendo a mí misma.
Un año y medio después, ese amante por sustitución que me busqué y al que me aferré como si me fuese la vida en ello, terminó con lo nuestro besando la boca de otra en mi cara, en la misma discoteca y ante la presencia de todos nuestros amigos. Nunca más he vuelto a saber de él. Es un curioso caso, sin duda materia para Cuarto Milenio. El curioso caso del tipo que se fue a por bebidas para los dos, se enrolló con otra en mi cara y nunca volvió.

Por supuesto pensé que la vida ya no podía tratarme peor. Cada uno valora el sufrimiento conforme a lo alto de su propio umbral y el mío aun no era lo bastante alto. Pensé: “primero me abandonan cual perro en la autopista diciéndome que todo era una broma y después, al siguiente individuo, lo abduce una choni sin sujetador, con botas blancas y falda vaquera”. Como no me quería en absoluto pensaba erróneamente “tan poco valgo que me han dado el cambiazo por lajuani y no he podido conseguir que él me quisiera”. No me decanto por si es más de Almodovar o de cine independiente el daño que pude llegar a hacerme y el que me dejé hacer. De verdad pensaba que definitivamente nada peor podía pasarme ya.

Pero la abducción de este tipo tuvo lugar en junio de 2010 y si algo he aprendido es a no decir muy alto eso de “ya no me puede pasar nada más” porque entonces la Vida misma te enseña que no es así y que te puede pasar algo peor o simplemente, malo de verdad.

En diciembre de 2010 mi padre falleció por un cáncer mortal de pulmón, en cuestión de un mes. La vida me puso en mi sitio definitivamente, a los 23 años me dio motivos para llorar y autodestruirme de verdad pero irónicamente fue cuando empecé a reconstruirme.

Absolutamente destrozada por la muerte de mi padre cometí un último error sentimental pero más breve afortunadamente. Se me da maravillosamente escoger hombres mal, ellos no tienen la culpa, yo les escogía mal y por eso nunca puede ir algo bien con la persona equivocada. Gracias a haberme destruido antes no lo hice al perder a mi padre pero caí en la mayor de las tristezas.

A los dos meses de morir él tuve un pequeño accidente de coche, no fue nada grave, recibí el típico golpe por detrás en ciudad en un día de lluvia. Pedí un taxi para mi madre y le dije que se fuera tranquila... Mi truco es fingir calma cuando me estoy muriendo por dentro, lo hago tan bien que a veces me confundo a mí misma -cada vez menos- y no sé como estoy hasta que me voy a dormir y mi cabeza tiene otros planes. Cuando ella se fue en su taxi me encerré en el coche en aquella rotonda, llovía, puse el cierre centralizado, quería que me dejaran tranquila, sólo escuchaba que el corazón me latía muy deprisa y el sonido de la lluvia caer sobre mi coche, no podía moverme pero quería hacerlo. Empecé a temblar, no sé cuanto tiempo pasó, conseguí coger el móvil, pulsé la “p” en contactos. Buscaba “padre”, apareció el número y llamé al móvil a mi padre y entendí perfectamente que estaba muerto en ese instante. Me quedé rígida e inmóvil, un policía me golpeaba la ventanilla, estaba colapsando el tráfico. Empecé a llorar, ni siquiera sentía el esguince cervical que me había pasado.
No sentía que tuviera a nadie en quien apoyarme sólo personas que me exigían cosas estúpidas como acabar mi insignificante carrera.

Salvo por mi padre, siento que he ganado mucho más de lo perdido porque un año después, cuando la última persona que escogí mal terminó con lo que quedaba de mí hice por mí todo lo que habría hecho por salvarlo a él, fue muy difícil hacer algo tan sencillo.
Dejé de fumar paquete y medio de tabaco diario, de salir, de beber, empecé a cuidar mi alimentación, pedí ayuda, invertí mi dinero en ponerme bien, fui a psicoterapia cada semana, lo pasé muy mal allí, lo puse todo de mi parte, vi marcharse a mucha gente de mi lado...
Me hice a mí misma y simplemente soy otra persona.
Entendí que debía ser la mejor versión de mí misma que pudiera ser y ya tengo la 27.0.
Aun me exijo mejoras, pero como mi hermana siempre me dice “allá donde vayas, no olvides quien eres ni de donde vienes”.