viernes, 4 de julio de 2014

No molestar

Hace ya unos cuantos años estuve con un chico un año y medio. Lo que tuvimos terminó cuando él decidió besar a una choni random en la discoteca en la que estábamos juntos; él, sus amigos, los míos y yo.

Decidí, en ese momento, mientras los veía juntos a unos pocos metros de mí, decirle con absoluta calma a mi mejor amigo que estaba a mi lado: "dame fuego por favor". Y me encendí un cigarro, pensé en que él se había ido a por bebidas para los dos y ahora estaba enganchado cual pelea de gatos a una choni sin sujetador miembro del club de la lycra blanca... Desconecté el cerebro y fui sólo sentimientos y dije tranquilamente: "voy a tirarle mi móvil a la cabeza, ahora vengo".
Mi mejor amigo me detuvo agarrándome el brazo y dijo: "no, no vas a hacer nada de eso. Te vas a ir de aquí con la cabeza muy alta, ni él ni sus amigos te van a ver llorar ni montar el número y vas a salir de aquí como la señora que eres". Entonces pensé en lo que había visto y estaba viendo, cuando hablé se hizo realidad. Había pasado.

Entonces toda la sangre del cuerpo se fue a mis pies y desapareció, yo era sólo frío y empezaron las imágenes: la playa, las noches, los besos, los atardeceres abrazados mirando el mar, sus amigos, la playa, las risas, las sábanas envolviéndonos desnudos, los buenos días, las palomitas, los cines, su perro, mi hermana, su madre, su abrazo, aquella cena, aquel paseo, su olor, aquella noche de pasión en medio de la nada... ¿Cómo se puede recordar tanto en un instante?

Y el frío gélido se hizo calor y me subió toda la sangre mezclada con alcohol y oleadas de rabia de los pies a la cabeza y una losa se me cayó sobre el pecho y dejé de respirar. La película no paraba y todo el alcohol me golpeó la cabeza y después el estómago y él estaba justo enfrente a unos ocho metros besando a la choni random.

Lloré, grité, me ahogué, no me dejaron tirarle el móvil a la cabeza y me fui de allí, lo eliminé y bloqueé a él y todxs sus amigos aquel 13 de junio. A las seis de la mañana, sin dormir, oliendo a ron barato y cigarros, a desamor con rimmel esparcido por la cara.

Nunca he vuelto a saber de él. Nunca me preguntó qué me pasó para desaparecer así de su vida- presumo que debido a lo poco que signifiqué para él-. Nunca tuve una explicación ni una disculpa pero yo sé construir explicaciones léxico-sintácticas que él no hubiera sabido darme. Me habría gustado tener una explicación o que me diera la cara por sus actos pero no lo hizo y con el tiempo no hizo falta. Sus hechos hablaron más alto que ninguna palabra que pudiera decirme, más o menos como me ha pasado con todos los que han venido después.

Aprendí muchas cosas. Aun hoy agradezco la enseñanza de mi buen amigo diciendo “vete sin hacer ruido, es lo que más jode”.

Ya sé irme sin hacer ruido, de verdad. Después de eso he tenido que volver a marcharme a hurtadillas alguna vez más y cada vez duele menos pero estoy cada vez más desengañada, más escarmentada y con menos ganas de pensar en que hay hombres maravillosos en alguna parte y que no hay que cerrar el corazón y tirar la llave a la fosa de las marianas. Hombres que son algo más que la cabeza no pensante que tienen en la entrepierna, hombres que saben ser hombres y no tienen que demostrarlo todo el rato teniendo sexo con todas las que pueden, compulsivamente, como si su sexo fuera una basura que tienen que ir tirando con presteza donde sea.

Por favor, a todos los que sois así, quedáos con vuestras novias o con la que os dé la gana y dejadme con mi tranquila vida.

Contadle vuestros problemas a un buen terapeuta o a vuestra madre, si no podéis contar con vuestra madre compráos un amigo. Pasad de mí para hablar de vuestra novia o vuestras ex. No soy vuestra amiga y nunca he pretendido serlo y eso es evidente aquí y en todos los países.

No me tiréis la caña porque os apetezco de reserva cuando vuestra novia acabe con vosotros o porque soy una especie exótica que nunca habéis coleccionado. No me escribáis, no me llaméis. No me contéis vuestros miedos, olvidádme todos, pillaos a chonis random, a vuestras ex que os utilizan y os dejarán cuando quieran.

Engancháos a lo cómodo porque yo vivo a cinco horas de avión. Metéos toda la droga del mundo, bebed también ¿por qué no?. Tened tendencias suicidas si os place pero no me lo contéis de madrugada en ningún caso y menos si a los dos días vais a volver con vuestra ex.

¿Tengo que decir que si tenéis novia no deberíais tontear conmigo de día y de noche vía móvil, facebook etc.?

Estoy muy decepcionada y muy enfadada, pero no contigo ni con él. Estoy muy enfadada conmigo y muy decepcionada porque he proyectado y he esperado cosas como siempre. No es culpa de ellos, ellos siempre son así y hacen las cosas así. El problema es mío pero me molesta que me tomen el pelo y me hagan creer cosas que no son con tanto ahínco. Me molesta vuestra falta de empatía y humanidad pero la acepto. Sólo dejadme en paz.

Sólo quiero que me dejéis vivir en paz todos y que seáis muy felices con vuestras novias, vuestras ex y vuestros complejos de Edipo.

De todas formas, como siempre digo, “lo que me pasa es lo mejor que me puede pasar”. La vida aparta de nosotros a esas personas que nos harían más mal que bien, las cosas que no pasan es porque no deben pasar o en eso creo yo.



0 comentarios:

Publicar un comentario